viernes, 24 de abril de 2009

Los Archivos de la Flor de Jade, Vol. 2 Presentación en Picassent, Valencia (Jornadas de Tierras Baldías): 18 de Abril 2009.



Habrá quienes crean que me gusta ponderar en exceso cuando diga que, si no más; sí tenía tanta ilusión y empeño por presentar en esa localidad valenciana en el marco de las jornadas de Tierras Baldías como en mi propia presentación en Córdoba.

Por la parte que puedo confesar, admito que esa tierra valenciana, su gente (especialmente agradecido a la gente del Concilio del Fénix: Carmen, Sergio, Sére del Oráculo, un beso… y los chicos de Tierras, Mª Paz, Juan… os quiero), todos los socios de ambos, toda la gente maravillosa de Picassent y Valencia, ya me robaron el corazón en las Cromel y determinaron que me pusiera realmente pesado ante mis editores por querer estar ahí, con ellos, en estas jornadas.







Buena parte de las vicisitudes que este libro ha tenido en su arranque se han visto, en buen medida, provocadas por esa machacona insistencia por mi parte… y no me arrepiento.










Por la parte inconfesable, que la hay, está el que existe una razón emotiva, personal y sangrante que convertía ese lugar, especialmente, en un extraño cierre de un círculo, de un camino iniciado, sin saberlo, en ese mismo lugar hace más una década.











Por todo ello, para mí, la presentación en Picassent se transformaba en algo más que un jalón más en la promoción, querida y necesaria, de este libro que comienza a caminar. Resultaba para mí todo un símbolo.



No puedo sino estar maravillado ante la manera de organizar y responder que tienen estos chicos. Las jornadas fueron de dulce. Me avisaron de antemano que sería algo modesto y, francamente, la modestia (absolutamente inmerecida) sólo la encontré en sus organizadores. Un evento cuidado, mimado al detalle y al extremo. Una organización exquisita, un trato de lujo, un resultado que impresiona al visitante. Nada que envidiarle a nada ni a nadie y sólo me queda por asombrarme lo que estos guerrilleros serían capaces de hacer sólo con el doble del presupuesto que han manejado. Recomiendo encarecidamente a todos los valencianos que acudan en futuras ediciones a este evento porque no saldrán decepcionados en absoluto. Por descontado, me autoinvito en calidad de asistente a cuantas tengan a bien organizar a partir de ahora. Serán, que nadie lo dude, fechas reservadas en mi calendario.





Aparte de mi modesta presencia, contaron, entre miles de ofertas, con una exposición exquisitamente montada de una gran cantidad de dibujos, lápices y material de Raúl Cáceres, Raúlo; ilustrador cordobés y gran amigo, presente en el evento, que generosamente donó buena parte de sus trabajos en Ed. Crom para el juego de rol de Aquelarre, al que estaba dedicado el evento. Disfrutamos todos, además, de la presencia de la ilustradora Cris Ortega, quien como aquél no paró de firmar y dibujar en todo su periplo en aquellas jornadas.



El acto concreto de mi presentación fue inolvidable. Un público generoso y expectante que me sorprendió hasta el último día. La acogida fue extraordinaria y me llevo su calor pegado al corazón. Firmé hasta agotar el brazo. Me sorprendió la presencia femenina, ampliamente mayoría. Quien siga asegurando que esto de la épica es un género de público masculino no tiene ni idea de lo que habla.












Lo mejor: Sin duda las personas que traté esos días… a muchos ya los conocía… Carmen, Sére, Sergio, Paz, Juan, Gemma, los Chicos de Taura, muchos usuarios de Espada y Brujería, del Fénix y de Tierras Baldías… muchos otros nuevos…



Especialmente encantadores Paula y Ramón de la Cueva del Goblin. Un especial agradecimiento a David, de WoD, quien se desplazó para asistir a evento. Deliciosa Cris Ortega ¡qué persona más adorable! En fin, un fin de semana de lujo en el que haber presentado mi libro sólo es una más de las muchas razones que convirtieron el evento en un placer indescriptible.



Estaré allí cada vez que ellos lo quieran, por descontado en las siguientes ediciones… no es un deseo ni una esperanza, es, en toda regla, una verdadera amenaza.



Un abrazo enorme a todos los que lo hicisteis posible. Mil gracias, de corazón.
J.Vilches.